El control prenatal es el seguimiento médico que se realiza durante el embarazo. Incluye evaluaciones periódicas que permiten monitorear el desarrollo del feto y la salud de la madre, asegurando que ambos estén en condiciones óptimas.
Realizar controles prenatales regulares permite detectar posibles complicaciones a tiempo, como la preeclampsia o diabetes gestacional. También proporciona la oportunidad de educar a la madre sobre cuidados esenciales y prepararse para el parto.
Se recomienda una visita mensual durante los primeros seis meses, cada dos semanas durante el séptimo y octavo mes, y semanalmente durante el último mes. Este cronograma puede ajustarse según las necesidades específicas de cada embarazo.
Antes de cada visita prenatal, es útil preparar preguntas y dudas para discutir con el médico. También es importante llevar un registro de síntomas, cambios y cualquier inquietud que pueda surgir durante el embarazo.